Zelideh Amparo Meraz Muñoz
¿Qué se entiende por diseño industrial?, ¿realmente fue creado o se fue dando?, ¿en realidad, qué son los mejores objetos? Estas son unas de las preguntas que fueron surgiendo del desglosamiento de la pregunta original. Sin embargo, a pesar de todas las interrogantes que tenía el equipo, había diferencias de opiniones y eso ayudaba a complementar las ideas propias. Se mencionó mucho el término necesidad o necesidades y consumismo, y creo que para resolver la interrogante principal, estos conceptos, son claves.
El diseño industrial es “una disciplina que busca resolver las relaciones formales-funcionales de los objetos susceptibles de ser producidos industrialmente.” [1] se involucra en todos los aspectos de la vida diaria, en todo lo que está alrededor.
El diseño surge de la necesidad de crear cosas para mejorar la vida de las personas, sin embargo, no hay un día en específico que señale la creación, pero, si se puede hablar de la creación de objetos, y ahí está implícito el diseño.
Los objetos son cosas que tienen un uso, una piedra puede ser un objeto en el momento que yo la tomo para sentarme sobre de ella y a pesar de que no hay un diseño creado, la forma de la piedra, me va a indicar si puedo o no sentarme en ella. De aquí pueden surgir las ideas para hacer un objeto de esa clase, y de ahí, la forma y la función.
En la prehistoria, la gente creaba objetos para realizar sus actividades diarias, de la necesidad surgió la idea, y se puede observar en distintas culturas, como las herramientas y los objetos son muy similares, esto se debe a que la necesidad era la misma.
Los objetos fueron mejorando cada vez más y la gente se iba especializando en la creación de cierto objeto, de ahí surgen los artesanos y posteriormente, el diseñador.
El diseñador en un principio se dio a la tarea de mezclar artesanía con diseño, después, logró implantar algo nuevo, lo vendió e hizo una producción en serie, pues se logra una tipificación. Se hacían muchas exposiciones y se intercambiaban los objetos por alguna otra cosa de valor. Los diseñadores comienzan a vender.
Desde ese momento el diseño se ve envuelto en la contradicción de hacer un objeto para satisfacer una necesidad, un gusto, o simplemente, hacer algo, para después, venderlo.
Se trata de combinar los distintos factores, satisfacer la necesidad y vender el producto, pero no solo era un diseñador el que vendía, ya eran muchos, entonces surge la competencia, donde los mejores productos, eran los que más se vendían. Los mejores productos eran los que lograban satisfacer en todos los aspectos al usuario, cumplía los requisitos formales, estéticos, funcionales, sociales, etc. Pero esto elevaba su precio y las ventas, bajan.
Las ventas comienzan a bajar porque había otros diseñadores que se preocupaban muy poco por lo funcional y hacían productos iguales en estética o en forma, pero más poco funcionales. Al entrar en el mercado el producto entraba directamente en una competencia. Sin embargo, Henry Ford, después de sacar al mercado un automóvil, la gente que trabajaba con él, al no haber competencia, decide subir el precio, el automóvil era un objeto de lujo, sin embargo, se dan cuenta que pueden producir más autos, darlo a un precio accesible y así, mejorar sus ventas[2]. La gente de Ford comienza a vender más, satisfaciendo la necesidad de la clase media, de la mayoría. Pero entonces dejaba de dar a los ricos ese status social, y dejaba de satisfacer sus necesidades secundarias; al suceder esto, deja de ser un mejor producto para la clase superior.
Los mejores productos, son aquellos que logran satisfacer todas las necesidades, ya sean primarias, secundarias, psicológicas, estéticas, etc. Sin embargo, es muy relativo. Se puede hablar de un objeto de calidad que no sea un mejor objeto.
Los objetos de calidad son los que están hechos para una larga vida, que en su proceso, tienen un buen acabado y en su transformación, hay muy buen aprovechamiento de la materia prima y de manufactura. Para lograr todo esto, se lleva a cabo un proceso de diseño en el que se siguen ciertos pasos para poder realizar un objeto, también se requiere de un buen planteamiento en el proceso de manufactura, entre otras cosas.
Pero aunque se lleve a cabo el mejor proceso y al final solo logra satisfacer las necesidades de un solo sector, deja de ser un mejor producto. Si existiera un objeto capaz de cumplir las necesidades de todas las personas, sería el mejor objeto.
El mejor objeto sería capaz de satisfacer económicamente a todos los sectores, se puede hablar de una cama, de una televisión, que la mayoría de las personas cuentan con ellas, pero existen diversos tipos, no hay un solo modelo de televisión, porque el mercado está saturado de productos con la misma función, pero que a veces cuentan con funciones agregadas, y esto aumenta su valor.
Los productos llegan al mercado y después se venden. Al hablar de mercado me refiero al intercambio monetario que hay por el producto, al valor que se le da a un producto según la demanda, pero al final todo esto depende del usuario, o en el peor caso, del consumidor.
Los consumidores son la gente que muchas veces compra porque la publicidad lo ataca psicológicamente y éste, se ve obligado a comprar cosas innecesarias. La mercadotecnia, la competencia, el consumismo, entre otras cosas, hacen que el diseño pierda mucho valor, porque es ahí donde todos se cuestionan:
El diseñador: ¿debo hacer algo que se venda o algo que funcione?
El vendedor: ¿debo vender algo que dure poco para vender más, o vender algo que dure más y vender poco?
El consumidor: ¿debo comprar algo económico o algo funcional?
Entonces retomando la pregunta, ¿El diseño industrial fue creado para vender más o diseñar mejores objetos? Llegué a la conclusión de que el diseño industrial no fue creado para diseñar mejores objetos ni tampoco fue creado para vender más.
El diseño industrial fue creado para satisfacer las necesidades y las exigencias de cada cultura. Con el tiempo se van dando factores importantes que logran modificar la principal causa del diseño. Entonces al entrar en un mercado y en una competencia, los objetos diseñados se vuelven objeto de la mercadotecnia y del consumismo. Donde los usuarios se transforman en consumidores y los diseñadores en vendedores.
BIBLIOGRAFÍA:
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