El Arte y el Diseño

¿EL DISEÑO INDUSTRIAL PUEDE LLEGAR A SER CONSIDERADO COMO ARTE?
Raquel Flores Zapata

Una de las actividades a las que ha estado abocado el hombre es a crear tecnología y materiales capaces de producir y desarrollar, cada vez con mayores tecnologías, productos que forman parte de la vida cotidiana del ser humano. El Diseño Industrial es la disciplina que configura esos materiales y da forma a esas tecnologías para dar al servicio de las personas, objetos capaces de responder a un sinnúmero de solicitudes.
Bien decía Antoni Gaudí: la originalidad consiste en volver al origen”
Poder empezar un proyecto de diseño e interrumpirlo antes de ser terminado. Interrumpirlo en la parte en la que el creador está esculpiendo la forma y buscándose a sí mismo en los intrincados rincones del volumen y las superficies. Cuando se deleita más en el fondo del producto que en el mismo objeto, creando del boceto una obra plástica dramática, comunicativa, expresiva más que el propio objeto de representación.
Una de las discusiones típicas de diseño industrial, es la ubicación de la disciplina en el ámbito profesional, considerando la fuerte carga de ingeniería y arte que hay en la profesión.
Definir los límites (ingeniería y arte), es en cierto modo, como las disciplinas mismas. Para una, hay claras fronteras y para el otro son vagas, inciertas.
Como la profesión del ingeniero, existen de alguna manera algunos parámetros para definir su campo de acción, y para él es claro lo que está dentro de su campo de aplicación y lo que es tarea de otros expertos.
Hablar de arte, en cambio, implica entrar en terrenos difusos y profundizar en cuestiones filosóficas e históricas que en mucho, dependen de interpretación personal, de sensibilidad, como el arte mismo ya que cada persona usa su sentido común al criticar algo y definirlo como arte o como solo un aporte de estética con función.
Existe mucha libertad en el diseño industrial y esto hace que su campo de actividad sea flexible. De alguna manera, siempre hay un cierto acercamiento al diseño desde el lado artístico. Quizá por razones personales, egoístas, en las que se busca en el diseño, un medio de expresión plástica de nuestros propios gustos y de los impulsos creativos imposibles de detener.
Creo, que en la medida en que el diseño sea ejecutado desde una perspectiva artística, tiene mayores posibilidades de permanencia cultural y de penetración en las emociones de las personas. En esta medida, el diseño será mejor apreciado y a pesar de la velocidad de su producción y renovación en los países industrializados, será más interesante y complejo su entendimiento. Quizá más elevado su nivel de apreciación,
En el proceso puramente creativo, tanto para el diseñador industrial como para todo artista plástico, existe un momento en la ejecución, en donde se produce un resultado plástico en donde se expresa la carga emocional interna del creador. Un momento en el que, en el caso del diseñador, se deja de lado todo compromiso funcional, y se requiere únicamente a la gran extracción de formas, líneas, superficies o simplemente elementos visuales que signifiquen una aportación plástica. Se viaja al origen propio.
En ocasiones ese momento de generación puramente creativa, produce resultados nuevos. Nuevos relativamente, cuando cuya novedad es simplemente apreciada por el creador; y nuevos absolutamente.
Ese momento, en el que el creador deleita únicamente sus sentidos, cuando el que lo hace lo hace para sí mismo. Es en donde, a mi parecer, se produce un momento de creación artística. Cuando se buscan las emociones, los efectos individuales y casi exclusivos de la persona, es cuando yo veo un momento de arte.
Quizás en este momento me doy cuenta , de que el arte es un método de exploración individual, pero para satisfacer intereses personales del creativo. Un mecanismo egoísta, en el que el creador emprende un viaje a su interior y encuentra dilemas que sólo puede entender y responder él mismo. Pero se entiende y observa cuando esta búsqueda es expresada, mediante métodos, mediante algo de praxis, mediante la actividad de producir formas, expresar.
“la única forma de tener una buena idea, es tener muchas ideas” - Linus Pauling.
Cuando el diseñador siente tener esa exploración hacia su ser, cuando se trata de satisfacer, no lo que los de mas comentan de alguna obra, sino el gusto de sus propios ojos; es cuando el siente encontrar el concepto visual, el balance formal que estaba buscando.
A veces, es simplemente buscar que el boceto inicial cumpla con ciertos requerimientos prácticos, pero existe un momento donde se pierde el interés de esos requerimientos pragmáticos y se comienza a dar gusto a uno mismo , a satisfacer los propios sentidos, y apreciación. Un momento que sólo la intuición y la necesidad de satisfacer dirige los sentidos.
en la medida que un creador busque satisfacer su propio gusto, va a producir un resultado que tenga un valor apreciable por otros. Y puede oírse un tanto absurdo, que al tratar de satisfacer intereses personales, se logre un producto que encante la apreciación de terceros, pero esto conlleva a otras de las discusiones en el diseño: la definición de estética como una relación entre creador-objeto-espectador.
Se expresa todo lo que él está buscando en sí mismo. Se mide su gusto, su nivel de búsqueda interna con influencia cultural externa y su capacidad de ejecución. Se mide su cultura, lo que lleva dentro.
En segundo lugar, si la obra esta llena de una capacidad de ejecución excelente se logrará ser apreciado por un espectador, el objeto establezca una relación de comunicación con él, a la que llamamos estética.
Si el objeto es percibido por el espectador como bello, entonces la relación establecida es positiva, e implica que el observador entienda los motivos o el mensaje que el creador mandó al desarrollar la obra.
Si el objeto es percibido como no bello, entonces la relación creador-objeto-observador, es negativa esto conlleva a un fallo de entendimiento entre los tres integrantes del dichoso dilema estético.
En mi opinión, cuando el objeto realizado viene desde lo profundo de creador, trae consigo una carga emocional, cultural, con muchas de las influencias que el creador absorbe diariamente. Para mí un ser creativo es primero un observador que absorbe información: analiza después construye con sus elementos propios, usando las influencias culturales y produce un objeto nuevo o sea que sintetiza.
El arte es sólo arte cuando es motivo de interpretación personal. pero el arte es sólo apreciado individualmente. Nadie puede criticar lo que a otra persona (con otro nivel de entendimiento de motivos creativos del artista o sentido común y practico ), le parece bello.
Creo, que cuando un diseñador crea procesos de diseño, como bocetos, modelos de trabajo o trazos, propuestas son interpretados por ojos externos al creador, pueden representar arte puro para el observador. Pero se establecerá una gran relación estética, sólo cuando se entienda el mensaje que el creativo pensó cuando desarrolló la obra.
Una de las partes más importantes, dentro del trabajo del diseñador industrial, es la generación del concepto. La etapa en la que se definen las proporciones principales, la actitud, la expresión, la fuerza y en general, todos los valores a través de valores mediante la generación de formas que los representan.
Quizá una diferencia clara entre el diseño y las artes plásticas puras, es el desarrollo de obras individuales. El diseñador muchas veces trabaja en equipo, cuando el artista plástico lo hace sólo. Pero en ambos campos, existe el momento creativo en el que se busca abrir cierta parte de su interior y buscar algunos atajos, responder preguntas y sacar algo, que quizá sin ser la respuesta misma, genere en el observador la necesidad inquieta de responder.
Esa etapa del proceso de diseño, en la que a veces nos alejamos de seguir una metodología es cuando nos concentramos solo en la creación de la personalidad del objeto, es la que yo considero una creación artística.

Por eso, a veces se consideran obras de arte, productos con elaboraciones artesanales o con algún toque de ingeniería.
Creo que podría decir finalmente, que un objeto de diseño industrial, es arte, cuando - incluso aislado de su contexto - su fuerza expresiva y abstracta, genera en el espectador motivos para imaginar. Y cuando en su conjunto, el objeto logra ser una obra digna de la apreciación, generando más preguntas que respuestas en el espectador, cuando lo excita, cuando lo inspira.
“la imaginación es más importante que el conocimiento” –Albert Einstein.
Pero es eso, al diseñar algo, el hecho de no saber a dónde se va a llegar, no saber qué parte de uno mismo se va a explorar con determinado proyecto, Porque en el diseño, como en todo proceso creativo, lo importante es la búsqueda de una nueva innovación.
“si ya sabes el resultado de lo que vas a hacer, qué caso tiene hacerlo” - Pablo Picasso.
Y para finalizar diría que es arte dependiendo del sentido común con que se mire, bien dicen también que la belleza esta en los ojos de quien la mira, muy personalmente para mi el diseño si puede llegar a ser considerado en cierto modo como arte ya que es una sinfonía de formas, líneas, colores, y expresiones de la propia persona que esta ejecutando determinado proyecto, es parte de su personalidad, y el arte es plasmar los sentimientos del autor.