11/01/2006

¿Las máquinas nos reemplazarán?

¿SON LOS OBJETOS NUESTROS INSTRUMENTOS, O NOSOTROS INSTRUMENTOS DE NUESTROS OBJETOS?
Rafael Álvarez Nava
Rosy Del Río Ramírez
Margarita Hernández Alvarado
Adriana Maldonado Elías
Adriana Rodríguez Reyes
Amelia Solís Barragán


Preguntas:
1. ¿Los objetos son nuestros instrumentos, o nosotros somos los instrumentos de los objetos?
2. Cuál es la diferencia entre un símbolo y una señal en la percepción humana, según la cultura?
3. Los nuevos productos, ¿Satisfacen totalmente nuestras necesidades o nos acercan al consumismo?
4. ¿Qué ha originado la cultura “usar y tirar”?
5. ¿Cómo vender a otras culturas los mismos productos respetando su identidad?
6. Los avances tecnológicos, ¿Desplazan las costumbres de una cultura?
7. La innovación tecnológica, ¿traerá beneficios a la sociedad o la destruirá?
8. ¿En qué afecta el medio ambiente artificial creado por el diseñador industrial?
9. ¿Los individuos deben ser vistos como individuos o como masa?
10. ¿Cuál es la verdadera razón de la compra de los objetos: necesidad o status?
11. ¿Cuáles son las responsabilidades del diseñador industrial, en concordancia con nuestra realidad actual?

Subtemas:
a. Necesidades
b. Diferentes culturas
c. Cultura “Usar y tirar”
d. Individuo- masa
e. Objetos: Necesidad o status

Objeto: Todo lo que puede ser materia de conocimiento o sensibilidad de parte del sujeto, incluso éste mismo.
Instrumento: Aquello de que nos servimos para hacer una cosa. Aquello que sirve de medio para hacer algo o conseguir un fin

Preguntas adicionales:
1. ¿Las máquinas remplazarán algún día las funciones humanas?
2. ¿En que punto exacto los humanos empezaron o empezarán a ser instrumentos de los objetos?
3. ¿La tecnología permite automatizar los objetos y “mejorar” nuestra vida, la usamos sin control?
4. ¿Cómo podemos usar la tecnología sin que ésta nos reemplace o supere? renunciamos a ella? la frenamos?
5. ¿Debemos confiar nuestro futuro a la tecnología?
6. ¿Debemos de confiar nuestro futuro y el de la tecnología a las manos de unos cuantos científicos?
7. ¿Será la ética de los investigadores lo suficientemente fuerte para no arriesgar nuestra integridad en el futuro?
8. ¿Los objetos evolucionan debido a nuestras necesidades o nosotros nos hemos adaptado a la rápida y constante evolución de los objetos?
9. ¿Hemos excedido nuestro de uso de los objetos, en aras del confort?
10. ¿Se le puede otorgar conciencia a una máquina?

Conclusión:
El hombre empezó a crear objetos desde su aparición en la tierra con el fin de optimizar y eficientar las diferentes actividades que realizaba; de tal manera que con la ayuda de estos instrumentos, su vida fue volviéndose más fácil, simple y placentera. Conforme paso el tiempo el hombre empezó a crear y crear nuevos objetas que lo ayudarán con su vida diaria.
Sin embargo, conforme la cantidad de objetos crecía y mejoraba, obteniéndose en la fabricación de dichos objetos diferentes ventajas como: costos más bajos, diseños más versátiles y novedosos, objetos más especializados y con funciones secundarias; se fue haciendo evidente nuestra dependencia hacia éstos.
El problema empezó cuando nuestro uso se convirtió en desmedido al momento de usar estos objetos; y en lugar de ayudarnos a realizar nuestras actividades diarias; hoy en día, muchos de los aparatos y objetos con los que interactuamos diariamente no nos ayudan, sino que nos resuelven la vida y nos traen por consiguiente numerosas desventajas como: mermar de manera impresionante nuestra capacidad de pensar, reducir drásticamente la experiencia y aprendizaje que pudiéramos haber obtenido de realizar nosotros las tareas, una contaminación excesiva, la creación de una cultura de ”usar y tirar”, etc., convirtiéndose lo que fue una solución en un problema y lo que empezó como un uso, en un abuso.
No obstante, todavía podemos alegrarnos de decir que todos los objetos, siguen siendo nuestros instrumentos; salvo contadas excepciones como las laptops, los teléfonos celulares, las secadoras, etc., Pero el futuro cercano no suena muy alentador para nosotros teniendo en cuenta el avance exponencial de la tecnología, la creación de ramas de la investigación como la inteligencia artificial, entre otras.
Por lo que no erramos mucho en decir, que no es una idea descabellada pensar que algún día las máquinas y nuestros objetos dejen de ser nuestros instrumentos y tristemente nos convirtamos en sus instrumentos, y nos utilicen solo para repararlos o darles un mínimo de mantenimiento. Sin embargo, eso no es lo más preocupante, sino que polarizando un poco nuestros fundados temores llegue el día de que las máquinas nos reemplacen totalmente en todas muestras actividades y formen su sociedad; dejando a los humanos, sus inventores, fuera de ésta.

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