Los instrumentos aseguran la felicidad

¿LOS OBJETOS SON NUESTROS INSTRUMENTOS O NOSOTROS SOMOS INSTRUMENTOS DE NUESTROS OBJETOS?

Adriana Berenice Maldonado Elias

A partir del siglo XVII empieza a proliferar una literatura en la que se presenta las máquinas como instrumentos capaces de asegurar a los hombres la felicidad en la tierra, y quizá también fuera de la tierra.
Las personas comenzaron por realizar diseños para poder satisfacer las necesidades de las personas pero siguieron diseñando y se fueron creando necesidades, aun que todavía queda gente que solo puede cubrir lo que son algunas necesidades y no se pueden dar ningún lujo.
Nuestras necesidades reales (y por tanto universales) son las necesidades físicas de sobrevivencia, por lo que son consideradas como primarias o básicas; cualquier otra necesidad, por lo tanto es una necesidad creada o secundaria. La satisfacción de esas necesidades depende en buena medida del ingreso económico de los individuos.
La brecha entre pobres y ricos está creciendo y esto genera grandes tensiones al interior de las sociedades. Esta diferencia es muy notable en el uso de los objetos y de la tecnología ya que las personas con pocos recursos económicos no tienen la posibilidad de poder adquirirlos y son los que menos dependen de ellos, ya que los ricos si tienen la posibilidad de adquirirlos y los utilizan en exceso sin darse cuenta que sin ellos no sabrían hacer nada.
Esto se ha salido un poco de control ya que las personas comenzaron por utilizar los objetos para poder hacer mas fácil su vida, pero se han hecho dependientes de ellos hasta tal grado de algunas veces no saber hacer las cosas por si mimos.
Muchos de los sectores del mercado de los países centrales, se acercan peligrosamente a un punto de saturación que puede acarrear un gran desempleo y desequilibrio económico, ya que las empresas prefieren utilizar maquinas en lugar de personas ya que es más seguro y económico.
El aspecto de desarrollo tecnológico de los países periféricos nos menciona que si bien en las naciones más desarrolladas es importante modificar la manera de consumir, pensar que, para reducir el desgaste ambiental, los países periféricos deben reducir el ritmo de su desarrollo industrial o limitar el acceso de su población a mayor número de satisfactores, sería, además de meramente injusto, desastroso en términos sociales y económicos.
Realmente es muy difícil poder frenar esta invasión de objetos pero yo considero que los diseñadores antes de sacar sus diseños al mercado deben realizar una planificación de acciones futuras:
¿Qué?, ¿Para quién?, ¿Dónde?, ¿Cuándo?, ¿Cuánto?, ¿Cómo?, ¿Habrá de hacerse o no hacerse algo?, ¿Habrá de impedirse que ocurra algo?
Se podría decir que el futuro de las personas para no ser desplazados por los objetos o depender de ellos esta en manos de unas cuantas personas (los diseñadores), pero yo no creo que sea cierto, todas las personas tenemos un poco de culpa, ya que nosotros somos los que usamos los instrumentos y la tecnología, no creo que este mal usarla, pero muchas veces no buscamos la forma de hacer las cosas por nuestros propios medios y enseñamos a nuestros hijos inconscientemente a depender de los objetos.
El desafío que tenemos delante como diseñadores, es el de concebir una nueva utopía, sin lo cual difícilmente será asegurada la sobre vivencia de la humanidad.
El hombre es demasiado inteligente y ha podido realizar objetos para satisfacer sus necesidades y para poder hacer su vida más fácil, debido a esto yo creo que cabe la posibilidad de que el hombre algún día pueda encontrar una forma de que esto no afecte tanto al hombre.
Podría haber un brillante y satisfactorio futuro esperando a la humanidad, si es que está tiene la sabiduría de avanzar y enfrentarse a las dificultades que le esperen, o haber una lenta y dolorosa decadencia si es que no lo hace.

BIBLIOGRAFIA
• “El diseño industrial reconsiderado” Tomás Maldonado
• “El tiempo del diseño. Después de la modernidad” Luís Alfredo Rodríguez Morales
• “Diseño y producción ” Tulio Fornari – Chel Negrin